
Así mismo, como docentes, llevamos a cabo nuestro quehacer en el marco de instituciones que deben garantizar ciertas condiciones o ejes fundamentales para la integración de TIC en los procesos educativos, tales como políticas, infraestructura tecnológica y procesos de formación de directivos, docentes y estudiantes.


Con estos elementos en mente, ahora podemos preguntarnos... ¿Cómo integrar tecnologías en los procesos de enseñanza y aprendizaje?
Tanto para los profesores que apenas comienzan a utilizar tecnología en su labor de enseñanza, como para aquellos que cuentan con más experiencia en este ámbito, la gran cantidad de opciones disponibles en aplicaciones y herramientas tecnológicas, en ocasiones, puede resultar abrumadora y paralizante. Sin embargo, la intención es superar ese posible bloqueo y encontrar maneras alentadoras de continuar en la ruta de integración de TIC.

Existen distintos modelos relacionados con el uso de TIC que pueden hacer de esta tarea una actividad transformadora y enriquecedora, tanto para el docente, como para sus estudiantes.
En este OVA, descubriremos cómo podemos utilizar la tecnología para diseñar e implementar experiencias de aprendizaje con integración de TIC en nuestro día a día, proporcionando lineamientos que le permitan aplicarlas en su práctica docente y aprovecharlas para beneficio del aprendizaje de sus estudiantes.
Piensa en lo siguiente:
Diseñar, desarrollar e integrar tecnologías de educación para alcanzar niveles altos de aprendizaje

La profesora Carmen encontró que ella podía llevar a sus estudiantes a alcanzar niveles de aprendizaje de orden superior, en donde pudieran realizar actividades relacionadas con la capacidad de análisis, evaluación, síntesis y creación. Todo esto, si lograba redefinir el uso de la tecnología dentro de sus clases.
El Modelo SAMR tiene como propósito ayudar a docentes, asesores pedagógicos y otros profesionales, a determinar el nivel de integración de la tecnología en un entorno de aprendizaje, y a reconocer si la tecnología está mejorando o transformando el aprendizaje. De esta manera, se logra el propósito de introducir, en el ambiente de aprendizaje, herramientas tecnológicas para lograr reemplazar y/o mejorar los métodos de enseñanza tradicionales.
- ¿Qué quiero hacer?
- ¿Deseo sustituir un proceso por otro o mejorarlo?
- ¿Voy a modificar completamente el diseño del curso para usar la tecnología?


La tecnología permite la creación de nuevas tareas. En este nivel, el docente plantea una nueva actividad con el uso de TIC, la cual favorece el aprendizaje colaborativo.
Estas son las preguntas que se deben atender:
- ¿Cuál es la nueva tarea?
- ¿Reemplazará o complementará las tareas anteriores?
- ¿Solamente es posible realizarla gracias a la nueva tecnología?
- ¿Cómo contribuye a mi diseño?


La tecnología permite un importante rediseño de tareas. En este nivel, el profesor reformula las actividades de aprendizaje que lleva a cabo regularmente sin el uso de estas. Dicha reformulación permite adaptar las actividades a las herramientas tecnológicas disponibles en la institución (Martí, 2013), lo cual depende, esencialmente, del uso pedagógico y didáctico que se le quiera dar a las TIC.
Están son algunas de las reflexiones que podría hacerse en este nivel:
- ¿Cómo se modifica la tarea original?
- ¿Ésta modificación depende de la nueva tecnología?
- ¿Cómo contribuye esta modificación a mi diseño?

La tecnología actúa como un sustituto directo de la herramienta y con mejoras funcionales. Es decir, las TIC le aportan progreso a una experiencia de aprendizaje que se ha venido implementando sin uso de estas, la actividad y la metodología no sufre cambios significativos en su diseño. En este segundo nivel del Modelo SAMR, el uso de las TIC pasa a manos de los estudiantes de una forma más activa que en el nivel de sustitución, realizando las tareas propuestas.
Algunas de las preguntas que puede hacerse son:
- ¿He agregado una característica al proceso de tarea que no podría hacerse con la tecnología anterior en un nivel fundamental?
- ¿Esta característica cómo contribuye a mi diseño?

La tecnología actúa como un sustituto directo de la herramienta, sin que esto implique un cambio funcional. Los docentes usan las TIC en sus actividades de enseñanza-aprendizaje pero no existe un cambio metodológico. Esto conlleva a que los estudiantes realicen las mismas acciones que antes hacían sin utilizar tecnología.
En este nivel es importante preguntarse:
¿Qué ganaré reemplazando la tecnología antigua con la nueva?¿Qué permite este modelo?

Si bien, no existe en la actualidad un modelo único de integración efectiva de la tecnología a los procesos de enseñanza y aprendizaje, se sigue avanzando desde la investigación y existen grandes progresos en la generación de conocimiento en esta materia.
El Modelo SAMR se entiende, entonces, como una guía útil para clasificar las actividades que emplean tecnologías. Es un modelo jerárquico que presenta cuatro niveles y que permite evaluar la forma en que las tecnologías son usadas por los docentes y estudiantes en las clases.
En los primeros niveles de sustitución y aumento, los estudiantes consumen conocimiento. En los niveles superiores de modificación y redefinición, los estudiantes analizan y crean sus propios conocimientos y productos.
Para García, Figueroa y Esquivel (2014), el Modelo SAMR está situado en el ámbito tecnológico; por lo tanto, es necesario que el docente primero logre los objetivos de aprendizaje de su disciplina y la metodología que utilizará para, posteriormente, seleccionar las tecnologías a emplear como herramienta en su actividad pedagógica.
SAMR (por sus siglas en inglés Substitution, Augmentation, Modification, Redefinition) fue introducido por Rubén Puentadura (2006, 2008, 2013) quién comenzó a proponerlo al final de la década de los ochenta, pero se no se hizo popular hasta el año 2006.
Caso del profesor Pedro Luis realizando una actividad evaluativa tipo quiz

El profesor Pedro Luis utiliza preguntas de evaluación cerrada (selección única, selección múltiple, falso o verdadero, etc.) para evaluar a sus estudiantes al final de la segunda unidad del curso.
Durante este semestre ha realizado distintas propuestas de integración de tecnologías en su asignatura.
Identifique a qué nivel del Modelo SAMR pertenecen cada una de las acciones realizadas por el profesor y arrastre el nivel del modelo SAMR correspondiente:
El profesor realiza un rediseño de la actividad evaluativa y usa la herramienta Kahoot para crear un concurso entre los estudiantes. Ellos realizan un trabajo colaborativo por medio de la conformación de equipos. Al final, la herramienta realiza el promedio de los puntajes y crea un podio con los primeros lugares
El profesor usa el LMS institucional (Learning Management System) para crear un banco con un sistema aleatorio de 50 preguntas que permiten que cada estudiante reciba un formulario con 10 preguntas distintas en cada intento.
La programación del formulario permite que cada estudiante reciba una retroalimentación inmediata. El profesor crea mensajes que explican la razón por la cual es una respuesta acertada o no, y el estudiante visualiza esta respuesta de manera inmediata.
El profesor Pedro Luis utiliza la herramienta Google Forms que le permite crear encuestas con preguntas de opción múltiple, falso o verdadero, con fechas, clasificaciones y preguntas abiertas, entre otras.
Caso de la profesora Ximena: diferentes estrategias que conllevan al logro de los objetivos

La profesora Ximena tiene como propósito que los estudiantes comprendan y apliquen los conceptos fundamentales de una de las temáticas que orienta. Por lo general, realiza evaluaciones tipo cuestionario para validar que los estudiantes entendieron el tema, pero este semestre ha decidido integrar las TIC para lograr los mismos objetivos de una forma diferente, aprovechando las posibilidades que estas ofrecen.
Durante este semestre ha realizado distintas propuestas de integración de tecnología en su asignatura.
Identifique a qué nivel del Modelo SAMR pertenecen cada una de las acciones realizadas por la profesora y arrastre el nivel del modelo SAMR correspondiente:
La profesora selecciona y reproduce en la clase un video sobre una de las temáticas de la unidad y hace algunas preguntas al final.
La profesora envía previamente a los estudiantes el material que debe ser leído antes de la clase. Al inicio de esta, resuelve las dudas que tienen al respecto y luego plantea un concurso entre los estudiantes, en el cual se establecen una serie de preguntas que ellos responden en línea desde sus dispositivos móviles. Al final, la herramienta realiza el promedio de los puntajes y crea un podio con los primeros lugares. A medida que avanza el concurso, pide a uno de los estudiantes que contestó bien la pregunta que le explique a sus compañeros el porqué de su elección.
La profesora plantea una actividad para trabajar en equipos, en la cual asigna a cada equipo un tema y da indicaciones de lo que deben hacer. Al final de la actividad, cada equipo debe crear un audio, video o cómic, entre otros, según las indicaciones dadas por la profesora y publicar el producto creado en el foro establecido previamente, junto con dos preguntas que abran a la discusión. Ellos deberán ser los moderadores del tema asignado.
La profesora reproduce un video en la clase, y al final aplica una encuesta que ha creado en una aplicación en la web, la cual posibilita que cada estudiante reciba una retroalimentación inmediata. La profesora también crea mensajes que explican la razón por la cual es una respuesta acertada o no, y el estudiante visualiza esta respuesta de manera inmediata.
La finalidad del Modelo SAMR es ayudar a los docentes a evaluar la forma en que se incorporan las tecnologías en los procesos de enseñanza-aprendizaje y, de esta manera, conocer qué tipo de usos tienen un mayor o menor efecto sobre el aprendizaje de los estudiantes (Puentedura, 2008).
La clave del Modelo no está en aplicarlo en forma progresiva, sino en idear cómo usar la tecnología para que proporcione a los estudiantes la oportunidad de aprender en otros escenarios. Es cierto que aplicar la tecnología a nivel de redefinición otorga los mayores beneficios de esta, pero cualquiera de los niveles puede ser valioso dependiendo de los objetivos pedagógicos, las expectativas que se tengan de los estudiantes y el contexto en el que se aplica o en el que se labora (Puentedura, 2008; 2003a).
García, Figueroa y Esquivel (2014) sugieren que el profesor tenga en cuenta los siguientes aspectos para implementar el Modelo SAMR.
Como docentes de educación superior, es usual tener distintos cursos o asignaturas a lo largo de un día o semana. En cada uno de estos encuentros se deben definir los propósitos a cumplir: ¿Alguna vez ha reflexionado acerca de cómo realiza la planificación de esas sesiones o encuentros presenciales, blended o virtuales?
Recuerde su última clase, la de ayer, la de esta mañana o la de la semana o mes pasado: ¿Considera la posibilidad de integrar tecnologías que ayuden a cumplir las metas de aprendizaje para favorecer el proceso de sus estudiantes?
Si está considerando la integración de tecnologías en los procesos de enseñanza y aprendizaje, lo invitamos a revisar la siguiente información en donde encontrará ideas acerca de tecnologías digitales y algunas de las posibilidades que ofrecen para gestionar la información, crear contenidos, proponer estrategias didácticas, propiciar la comunicación y plantear evaluaciones.